Torrubia se despide de sus fiestas y abre paso a un nuevo año

Arrancamos una nueva temporada en La Voz de Torrubia, la undécima ya, y aunque estamos consolidados, no deja de imponernos cierto vértigo pensar qué nos traerán estos próximos meses en términos informativos. Para muchos, el año nuevo empieza el 1 de enero, pero para nosotros, casi siempre, comienza justo después de las fiestas de la Virgen del Valle.

La Plaza de D. Pedro Roca volvió a ser el epicentro de la vida social y el encuentro. En el pregón de José Ángel Medrano, pudimos revivir una vida dedicada a la colaboración, y a través de los ojos de Yaiza, reina de las fiestas 2024, experimentamos la ilusión renovada de vivir unas fiestas inolvidables junto a sus amigas tambien en la Corte de honor. Las orquestas animaron las noches hasta bien entrada la madrugada, la percusión de Sambarrubia volvió a marcar el ritmo, y el cielo se iluminó con la pólvora de Vulcano. Como cada año, la Virgen del Valle recorrió de nuevo las calles de su pueblo y llegó con su mirada las casas de sus fieles. La comisión organizadora se despidió después de dos años de intenso y desinteresado trabajo, dejando un legado que hemos disfrutado todos.

Durante los días previos, volvimos a disfrutar de las tradicionales vacas por la calle ‘Estrecha’ y Cara de Dios, como en los viejos tiempos. No faltaron las charangas, los disfraces, los torillos de fuego y las carretillas, esos elementos que nos devuelven a una nostalgia compartida. Pero ahora, tras la algarabía, el silencio regresa a nuestras calles, y nos invade una melancolía inevitable.

Solo nos queda recordar con cariño lo vivido y prepararnos para un nuevo ciclo que comienza.