Mentes romanas
MLuz Domínguez
La consejera de Educación, Cultura y Deportes, Rosa Ana Rodríguez, ha adelantado hoy que el yacimiento de Noheda, ubicado en la provincia de Cuenca, acumula desde el mes de julio una cuarta parte de todo el turismo arqueológico de Castilla-La Mancha.
A finales de los años 70, varios arqueólogos se hicieron eco de los restos detectados en superficie. Gracias a ellos y a diversos hallazgos de cerámica y algunas monedas, pudieron identificar el asentamiento como una villa tardorromana, datada entre los siglos III al V. A partir de 2010, una vez excavados completamente los pavimentos, comenzaron a difundirse de manera rigurosa diversos aspectos de la villa, sobre todo de sus mosaicos.
No conozco el yacimiento aun, pero todas las referencias que me llegan de él hacen que sea un lugar de obligatoria visita. En los mosaicos de la villa no falta la música con un órgano reflejado al que le dan aire dos niños mediante fuelles, tampoco faltan otros de escenas figurativas e históricas. Verdaderos tesoros sin lugar a duda.
Tanto Noheda como los cientos de vestigios romanos que tenemos repartidos por todo el país solo dejan claro que si algo era la arquitectura del pueblo romano era igual de original como práctica.
Sus construcciones son claves en el sector servicios: termas, foros, teatros, anfiteatros, puentes, acueductos… Todo ello sin dejar al lado la cultura y la política porque no había mejor propaganda electoral que creando lugares para mejorar la calidad de vida.
Cada vez que visito algunos de estos vestigios no puedo dejar de pensar en esas mentes pensantes, creativas que con unos medios mucho mas rudimentarios levantaron una arquitectura que ha permanecido siglos y que, en muchos casos, solo ha sido deteriorada por el propio hombre.
